"Aguanta con valor las dificultades y las malas rachas, porque luego disfrutaras de los buenos tiempos. Solo el que persevera encuentra un mañana mejor".

martes, 20 de septiembre de 2011

Noches de Pucela por Laura Turuelo

NOCHES DE DES-ENCUENTRO!

Siempre pensé que septiembre es el mes perfecto para enamorarse.
Pero nunca pasó!
Los días desgranando luces diferentes. Los frutos madurando… ¡pero no pasó…
A cambio estos primeros días me traen un tozudo y difícil desamor, así que vuelvo  a la ciudad donde pasé más años de mi vida.
Dejo colgada mi obsesión amorosa en ese primer árbol deshojado que encuentro en el camino...
Atravieso el  Puente colgante que une la ciudad con un claro y bucólico aire parisino para un reencuentro festivo y nocturno.

Mi vestido rojo es como un cuchillo ensangrentado sobre mi alma y sobre mi cuerpo.
La ciudad es estos días un mosaico multicolor de sonidos distintos que pretenden aunarse, como para sujetar este verano que siempre se nos va y guardar esos días calidos y azules en la memoria.
La plaza pucelana bulle como un solo corazón acompasado por el ritmo del cantante que actúa esta noche.
Vamos a los lugares de siempre y otros remozados , que se me antojan; tan diferentes ¡ y caminamos por las calles cercanas a la plaza….detrás del ayuntamiento.
Y de pronto! te ví a  ti!!
Te había visto tantas veces al pasar por allí!!
Tu con tus esfuerzos, yo con los míos.
No había reparado en tu atlético cuerpo muculazo y desnudo, sujetando la fuente. Y estabas allí! en una espera tensa y fatigosa  dorada por el bronce y las luces de la noche.


Me acerqué a tu cuerpo sin poder reprimir mi emoción.
¡Tú estabas allí!!!

Mis dedos buscaron tus ensortijados cabellos dorados fundiéndose en tiernas caricias…
Y senti que mis labios se acercaban a tu boca estática fría.


Ese contacto suave, hizo desfallecer tu voluntad de hierro, tu memoria de piedra,
y me pediste con un temblor tu liberación de ese sortilegio de vida
Y lo hice¡ lo hice...!

Saqué tu alma que uní  a la mía en un instante puro e intransferible de amor, mientras los tráficos de la calle pasaban a nuestro lado y la gente caminaba sin saber……
Pero tú y yo éramos yo y tú
Calor y hielo derretidos
La noche fue pasando con sus ráfagas de somnolencia,  y mi cansancio pleno.
De regreso a casa en el caminar encontré el vehiculo que pese al tiempo nos esperaba


Coloque tu alma sobre el volante y me despedí de todos
Este viaje iniciado, camino al infinito nos lleva a los lugares que nunca pisé.
Cimas nacaradas por auroras…
Cielos tachonados de estrellas fugaces.
Luciérnagas que señalan el camino
Esos caminos dorados hacia lo eterno, hacia ese polvo de estrellas que ya somos… ese………
“Polvo de estrellas, pero enamorado”

Laura Turuelo

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